miércoles, 5 de enero de 2022

LOS HERMANOS ÁLVAREZ CHICO, COMPAÑEROS DE CORTES EN LA CONQUISTA DEL IMPERIO AZTECA A LOS 500 AÑOS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA BAHIA DE SANTA LUCIA EN ACAPULCO.

 


1.     LOS HERMANOS ÁLVAREZ CHICO, COMPAÑEROS DE CORTES EN LA CONQUISTA DEL IMPERIO AZTECA A LOS 500 AÑOS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA BAHIA DE SANTA LUCIA EN ACAPULCO.

 

En el rico intercambio cultural que nos ha permitido dar seguimiento a la polémica entorno al descubrimiento de la bahía de Santa Lucía en Acapulco, hemos recibido un buen numero de recursos que nos permiten recuperar un poco la historia de los hermanos Alvarez Chico, uno de los cuales, Francisco, ha sido negada su existencia histórica por parte de algunos aprendices de "historiadores" en Acapulco.

Nos ha sido enviado de Oliva de la Frontera, un esplendido trabajo que ahora les transcribimos. El autor de estas notas es Alfonso Gil Soto, quien con mucho orgullo ha recuperado la memoria de sus antecesores oriundos de Oliva de la Frontera, en el libro: Viajes al nuevo mundo. La participación de Oliva de la Frontera en la conquista y colonización de América.Oliva de la Frontera (Badajoz) : Librería Balboa, 2000. ISBN 84-607-0195-6, pp. 39-44.

Transcribimos el capítulo que nos interesa:

Aunque parece verdad que los hermanos Álvarez Chico eran naturales de Villanueva del Fresno, no es menos cierto que mantuvieron también una relación muy estrecha con Oliva, pues sus padres habían establecido allí su residencia y es muy posible que ellos mismos llegaran a ser vecinos de esta localidad.

Varios documentos los vinculan a Oliva. Entre ellos el asiento de pasajeros de Francisco y Hernando en 1511. En él, ambos afirman que son hijos “de García Álvarez Chico y de Inés de Terrazas, vecinos de Oliva, Condado de Feria”. (Catálogo de pasajeros, L. 1, E. 203 y 209). Además, es significativo que marcharan a América acompañados de otro vecino de esta localidad bajoextremeña. No obstante, por estar más vinculados a Villanueva, no se ha realizado un estudio demasiado minucioso de sus vidas.

Hernando, Francisco, Juan y Rodrigo Álvarez Chico eran hijos de García Álvarez Chico, un hidalgo que había servido “a los rreyes Cathólicos en las guerras del Reygno de Granada”.

El encargado de abrir el camino hacia las Indias al resto de hermanos debió ser Hernando, que ya desde 1509 se encontraba en tierras americanas. Se sabe que aquel año, precisamente, participó en la conquista de Puerto Rico.

En 1510 decidió volver a España y tan sólo un año después, regresó a Las Antillas acompañado por su hermano Francisco y por otro olivero llamado Pedro Vázquez. Llegados a su destino, se unieron de nuevo a la hueste que continuaba la pacificación de Puerto Rico. Hernando Álvarez Chico, según el testimonio de su propio hijo, “murió (en esta campaña), que lo mataron los Yndios”.

Desde 1511 hasta 1518 nada sabemos de la vida de los tres hermanos supervivientes. Nos consta, sin embargo, que en esta última fecha se encontraban en la isla de Cuba y, aunque no puede confirmarse, es posible que participaran en su conquista. Lo cierto es que cuando se organizó la armada de Hernán Cortés para explorar la costa continental, decidieron enrolarse en busca de nuevos horizontes y de las enormes riquezas que se creía escondía el continente.

La expedición del conquistador natural de Medellín estuvo llena de obstáculos desde el primer momento. (Sobre la expedición de Hernán Cortés existe una bibliografía muy amplia, imposible de resumir en esta nota. No obstante puede consultarse al respecto uno de los últimos trabajos aparecidos sobre el tema, la monumental obra de Hugh Thomas,; La conquista de México, Madrid, 1994). El extremeño partió de Cuba sin el permiso del gobernador Diego Velázquez y eso produjo división de la hueste en dos bandos enfrentados. Por un lado, los partidarios del gobernador intentaron boicotear la expedición y conseguir que regresara a Cuba; por otro lado, los seguidores de Cortés, casi todos extremeños, apoyaron incondicionalmente a su líder para conseguir llevar adelante la difícil empresa que habían comenzado.

Los hermanos Álvarez Chico formaban parte del grupo de amigos y partidarios del conquistador extremeño y a cambio de su apoyo, éste les concedió desde fechas tempranas el privilegio de ocupar cargos importantes en el ejército. De este modo, cuando al llegar a la costa mejicana se fundó Villa Rica de la Veracruz, primera ciudad castellana en Méjico, Francisco Álvarez Chico fue nombrado procurador general del nuevo emplazamiento y, cuando la hueste partió hacia el interior, rumbo a la capital azteca, él fue quien quedó como capitán de ciento cincuenta soldados que permanecieron allí. El procurador general de un consejo era el encargado de cuidar de los derechos del común de vecinos (Cervantes de Salazar, F.; Crónica de la Nueva España, B.A.E. Tomos 145-246, 1971. Tomo I, p. 219). Francisco Álvarez Chico aceptó quedarse en la villa recién creada pero no sin antes haber conseguido de Cortés la promesa de repartir las ganancias de la expedición también entre los que se quedaran allí (Thomas, H.; Op cit, p. 263)

A su vez, a Rodrigo Álvarez Chico le fue concedido el cargo de veedor del ejército. A:G:I: Patronato, 180, R. 2. El veedor era en las expediciones de conquista uno de los cuatro responsables de la Real Hacienda, junto con el tesorero, el contador, y el factor. Debía estar presente en las fundiciones de metales preciosos para velar por los intereses de la Corona.

Juan, el tercero de los hermanos, apenas aparece en las crónicas y, por lo tanto, no sabemos qué papel desempeñó en estos sucesos.

A lo largo de la conquista, los dos hermanos de los que tenemos noticias participaron activamente en los principales hechos acaecidos. Sobre todo Rodrigo, pues Francisco estaba enfermo y era más un hombre de negocios que de armas. Mientras el primero de ellos era enviado de un lugar a otro con diferentes misiones, el segundo se le encomendaba el mando de soldados que quedaban en plazas estáticas. Por ejemplo, cuando el enviado del gobernador de Cuba, Pánfilo de Narváez, arribó a la costa con intención de prender a Cortés, Rodrigo fue el encargado de negociar con él. Era ésta una misión que sólo podía ser encomendada a un hombre de la máxima confianza, un individuo que fuera, tal como lo describe Cervantes de Salazar, “de mucha prudencia y valor”. Tras el fracaso del diálogo, Hernán Cortés salió de Méjico con su ejército para enfrentarse a Narváez y de nuevo se hizo acompañar por Rodrigo, quien incluso participó a su lado en la batalla que entablaron con el recién llegado.

Por el contrario, Francisco jugó en estos acontecimientos un papel muy parecido al que había desempeñado al llegar a Veracruz. Según el historiador Hugh Thomas, se quedó junto a Pedro de Alvarado guardando la capital del Imperio Azteca. Era imprescindible para Cortés dejar Tenochtitlán hombres de su entorno para evitar que surgieran conflictos entre los españoles. Es evidente que la presencia de un cortesista incondicional como Francisco contribuía a reforzar la oposición de su lugarteniente Alvarado.

También se desprende del estudio, tanto de las crónicas antiguas como de los trabajos actuales cobre la conquista, que Francisco y Rodrigo, como miembros de la parcialidad de Cortés, actuaron en ciertas ocasiones como consejeros. Así, en los prolegómenos de la “noche triste”, cuando el ejército castellano se encontraba asediado por los indígenas, Rodrigo Álvarez Chico y otros individuos aconsejaron al de Medellín que abandonase la ciudad de Tenochtitlán cuanto antes. Éste les hizo caso, y es muy posible que gracias a eso consiguieran salvar la vida los cuatrocientos supervivientes de la catástrofe.

Como último ejemplo de la confianza que el líder de la hueste depositó en nuestros protagonistas, sirva el que exponemos a continuación; pasada ya la derrota de la “noche triste” y rehecho el ejército castellano, Hernán Cortés acordó enviar dos emisarios a la isla La Española para adquirir armas y, a ser posible, reclutar más hombres. Comenta Bernal Díaz del Castillo que para tal misión eligió “a Alonso de Ávila, que era capitán y contador desta Nueva-España, y juntamente con él envió otro hidalgo que se decía Francisco Álvarez Chico, que era hombre que entendía de negocios”. Precisamente gracias a su capacidad negociadora, dice Hugh Thomas que se organizó en Santo Domingo una pequeña armada destinada a ayudar a Cortés y sus hombres.

Finalizada la conquista de México, entra en escena Juan Álvarez Chico, el cuarto de los hermanos. Al parecer fue enviado por Cortés a conquistar el pequeño reino indígena independiente de Colima, situado junto al océano Pacífico y habitado por guerreros que opusieron gran resistencia a los invasores.

Al llegar a su destino, Juan Álvarez Chico dividió sus fuerzas para intentar llamar la atención de su enemigo por dos puntos distintos. Es decir, pretendía que su lugarteniente Alonso de Ávalos distrajera a los indígenas, para poder él apoderarse de la capital de Colima. No ocurrió como tenía previsto, pues los defensores salieron al encuentro y lo derrotaron. Por su parte, Alonso de Ávalos encontró el terreno más despejado y pudo aguantar hasta que llegaron refuerzos de Méjico. Parece ser que Juan Álvarez Chico murió en el encuentro, aunque no es algo que esté absolutamente comprobado. La confusión parte principalmente del testimonio del conquistador y cronista Bernal Díaz del Castillo, quien declaró lo siguiente:

 

“al Juan Álvarez Chico, que había ido por capitán no sé qué se hizo dél;

paréceme que murió en aquella guerra”.

 

Los otros dos hermanos, Francisco y Rodrigo, fueron premiados por los servicios prestados a la Corona en la conquista de Nueva España, con el disfrute de sendas encomiendas. Como se ha dicho, éste era el mejor regalo que podía recibir un conquistador, pues con ello se le garantizaba una vida tranquila, próspera y apacible.

Francisco Álvarez Chico murió en Santo Domingo, quizá en alguno de sus viajes de negocios, aunque desconocemos la fecha en que se produjo el fallecimiento. Por su parte, Rodrigo murió entre los años 1543 y 1547.


domingo, 19 de diciembre de 2021

The most beautiful bay in the world celebrates 500 years of its discovery



The most beautiful bay in the world celebrates 500 years of its discovery
| People | America Edition

The bay of Santa Lucía, classified as the most beautiful in the world, located in the coastal city of Acapulco, celebrates 500 years of its discovery as a tourist and commercial reference between Mexico and Asia.

In the Acapulco history books, it is noted that after the conquest of Tenochtitlán, the Aztec capital, in August 1521, Hernán Cortés began exploring the territory of New Spain.

Among other objectives, Cortés wanted to find a point between the oceans that would serve to reach what is now known as the Moluccas Islands, an Indonesian archipelago that in the 16th century was called the Spice Islands due to the large number of aromatic plants in the area. . From then on, the islands became a strategic point for the spice trade between Asia and America.

Cortés put Francisco Álvarez Chico at the head of the expedition, who, following routes known to merchants and tax collectors, arrived on December 13, 1521 at the port of Acapulco and named the bay Santa Lucía, following the custom of the Catholic holy book that honors that day to Santa Lucia de Siracusa.

The Spanish expedition members verified that the bay of Santa Lucía was a perfect place to unload merchandise from the ships due to its deep waters compared to others in the area.

Those very special conditions of the bay allowed the commercial route that connected Asia-Spain, through Mexico, to begin, being El Galeón de Manila, better known as La Nao de China, the ship that established an extraordinary commercial and cultural exchange.

THE PEARL OF THE PACIFIC

However, the local historians of Acapulco do not agree on the exact dates of the beginning of the history of the port, recognized worldwide to the point of being considered the pearl of the Pacific both for its commercial importance and for its unique, golden and beach beaches. warm waters.

The writer Tomás Oteiza Iriarte has defended that the date of the commemoration of the beginning of the history of Acapulco is this month of December.

“We follow the historical data that we believe to be more consistent because there are different opinions, but Tomas Oteiza in the book” Acapulco: Ciudad de las Naos de Oriente and modern mermaids “, maintains that the group of explorers led by Captain Francisco Álvarez Chico arrived to this bay on December 13, 1521, “said the pastor of Acapulco, Juan Carlos Flores Rivas.

Juanita Lobato, in charge of the municipal newspaper library of Acapulco, prefers, however, that the bay be known as Acapulco, following the opinion of the local historian Leonardo Flores.

In any case, and despite the commercial significance of the port of Acapulco, it was not until the early 19th century that the first official maps of the bay were drawn up thanks to Alexander Von Humboldt, the German explorer and geographer.

With 8 kilometers of blue and gold color and located between two mountains belonging to the Sierra Madre Sur, the bay already became in the 20th century a tourist reference in Mexico and the Pacific.

Its beaches and luxury hotels were visited in the 1950s by personalities John F. Kennedy, who, before winning the presidency of the United States in 1960, spent his honeymoon in Acapulco with his wife Jacqueline.

Elizabeth Taylor, Elvis Presley, Frank Sinatra, Sylvester Stallone, Bono, Julio Iglesias, Rod Stewart, Michael Jackson, among others, were also able to enjoy these beaches, until they made Acapulco a true tourist pearl of the Pacific.

viernes, 17 de diciembre de 2021

LOS HERMANOS ALVAREZ CHICO, A 500 AÑOS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA BAHIA DE SANTA LUCIA EN ACAPULCO

Esplendido logo aportado por el dibujante profesional Luis Funk 
expresamente como aporte para este aniversario

 LOS HERMANOS ALVAREZ CHICO, A 500 AÑOS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA BAHIA DE SANTA LUCIA EN ACAPULCO

Pbro. Lic. Juan Carlos Flores Rivas


    Todavía resuena en nuestro ambiente acapulqueño el ambiente celebrativo por el 500 aniversario del descubrimiento de la Bahía de Acapulco, y su denominación como Santa Lucía, por parte de exploradores españoles liderados por el capitán Francisco Álvarez Chico, un 13 de diciembre de 1521.

    Celebración que de forma sorpresiva en este año 2021 se ha desdoblado, por quienes haciéndose eco de un grupo que ya desde hace varios años han hecho la contra, ahora inaugurando una serie de celebraciones, en torno a otra fecha, y con éste, sin darse cuenta, "nos han hecho el caldo", como se dice popularmente en nuestra costa guerrerense.

    No reconocemos en nuestros retractores un ánimo perverso, sino una falta de método para actualizar los conocimientos, conforme a una nueva metodología histórico critica, la HISTORIA DE ACAPULCO falta por hacerse, no basta con repetir librillos que carecen de rigor académico, sino hundirse en la profundidad de los Archivos históricos, leer más, y reconocer con honestidad intelectual, que muchas cosas más faltan por conocerse.

    Por nuestra parte, sin recursos económicos, pero haciendo uso de las nuevas redes sociales, hemos sido contactados por historiadores de España, que leyéndonos, se unen a nosotros, y nos facilitan un mejor conocimiento de los hechos que no están a nuestro alcance. 

    A principio de año, nos escribieron de Oliva de la Frontera, Extremadura, nada más y nada menos que la PATRIA CHICA, de los hermanos Álvarez chico, escritores resueltos, quienes están al tanto de nuestro recorrido celebrativo, con orgullo, de uno de sus hijos: FRANCISCO ALVAREZ CHICO.

    Esto va dedicado a aquellos que una y otra vez han machacado que este personaje es inventado y no existe. Lamentamos decirles lo contrario. Y como está de moda hoy una frase en las redes sociales: LEER, EVITARÀ QUE PIENSES QUE FRANCISCO ALVAREZ CHICO NO EXISTIO.


    En el blog http://rioardila.blogspot.com/, encontramos la noticia de un texto impreso como libro, que posteriormente transcribiremos. 

    De Villanueva del Fresno vinieron los padres: García Álvarez Chico e Inés Terrazas y se instalaron en Oliva (de la Frontera, Provincia de Badajoz, comunidad autonómica de Extremadura, España), lo normal es que vinieran a trabajar la tierras del Duque que por aquellos tiempos daban en aparcería. Sus hijos: Hernando, Francisco, Rodrigo, y Juan.

    Como ocurre siempre, mas tarde, cuando los hijos se hacen mayores, ya las tierras son insuficientes para alimentar tantas bocas y tomaron la dolorosa decisión de emigrar, entonces el lugar donde estaban las grandes oportunidades era Las Indias occidentales.

    HERNANDO, el mayor en 1509 estaba ya en tierras americanas y fue con Ponce de León a la conquista de Puerto Rico. Volvió a España y de nuevo regresó a América, vinieron con él su hermano Francisco y algunos oliveros más. Al parecer Hernando perdió su vida en una de las luchas con los indios.

    FRANCISCO, que era hombre de confianza de Hernán Cortés al igual que sus hermanos, cuando fueron a la conquista de la ciudad de México se quedó en Veracruz una nueva ciudad fundada por los conquistadores. Ocupó el cargo de Procurador General. Le exigió a Hernán Cortes que los que no fueran con él a la conquista de México tuvieran los mismos beneficios, cosa que Cortés le prometió.

    En alguna que otra ocasión cumplió misiones delicadas con éxito, ya que tenía fama de ser un buen negociador.

    En 1521 fue enviado por Cortés a la zona del actual estado de Guerrero y fue el primer español en ver desde unas montañas la bella bahía de Santa Lucia donde hoy se halla la turística y afamada ciudad de Acapulco.

    Todavía se recuerda allí, y las autoridades civiles y eclesiásticas en un acto solemne reciente lo recordaron.

 El arzobispo en una homilía, vino a decir: "Esta hermosa bahía de Santa Lucía fue descubierta por el almirante Francisco Álvarez Chico el 13 de diciembre de 1521, apenas consumada la conquista de Tenochtitlán por Hernán Cortés, y 10 años antes de la aparición de la Virgen de Guadalupe en el cerro de Tepeyac al indio Juan Diego. (En otro apartado contaremos la relación curiosa de fray Juan González de Valencia del Mombuey con este hecho milagroso).

    La subdirectora del Museo Nacional de Antropología e Historia de Acapulco en una conferencia que dictó recientemente "Acapulco y la nao de la China" también conocido como "Galeón de Filipinas" que hacía la ruta Acapulco- Filipinas y Filipinas-Acapulco, en cada viaje si no había percances tardaba 6 meses. Venia repleto de pasajeros y de objetos de lujos asiáticos. Era un gran acontecimiento en Acapulco la llegado de este barco. Pues la subdirectora cuyo nombre es María Cristina Suárez Farías hizo una referencia a Álvarez Chico: "Fue Francisco Álvarez Chico quien observó por primera vez en el otoño de 1521 desde la cima de algunos de los cerros que rodean la bahía, unos de los paisajes más bonitos de la Tierra".

    RODRIGO ALVAREZ CHICO: Fue con el ejército de Narváez a apresar a Hernán Cortés, con otros soldados fue enviado a negociar con Cortés la rendición, pero se pasaron todos a las filas del de Medellín. Nombrado veedor de ejercito de Cortés en defensa de los intereses de la Corona. Fue a la conquista de México y cuentan algunos columnistas que aconsejó a su jefe abandonar México cuando las cosas se pusieron mal. Recibió una encomienda como premio a su labor y se cree murió por el año 1545.

    JUAN ALVAREZ CHICO, el nacido en Oliva, también colaboró con Cortés en la conquista de México y otras zonas.

    Se sabe que en 1522 con dos barcos construidos en el istmo de Tehuantepec llegó hasta el río Basas y plantó cruces en señal de ser tierras conquistadas para el rey de España. De vuelta de este viaje llevó a Cortes oro y piedras preciosas.

    Más tarde fue enviado por Hernán Cortés a la conquista del reino de Colima al SO de México, junto a la costa del Pacifico. Dividió sus fuerzas en dos partes, una al mando de su lugarteniente Alonso de Ávila y otra a su propio mando.

Dice Bernal Diaz del Castillo: "Villa Fuerte y Juan Álvarez Chico fueron a la conquista de Zacatula y Colima respectivamente. A Villa Fuerte le dieron mucha guerra y le mataron 100 soldados, se negaron a obedecer a los españoles y darles tributo. Juan Álvarez Chico que había ido por capitán a Colima, no sequé se hizo de él; paréceme que murió en aquella villa a mano de los nativos. Fue mandado Cristóbal de Olid a sofocar la revuelta Colima. Un nuevo levantamiento de los de Colima fue sofocado definitivamente por Gonzalo Sandoval."


    Estos, son pues, entre otros, hijos ilustres de Oliva de la Frontera. Y aun hay más, ya nace la iniciativa de HERMANAR las ciudades de Oliva de la Frontera con Acapulco, en reconocimiento de la Azaña de uno de sus hijos. Continuaremos...